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Sunday, December 13, 2015

Sobre Cómo Aprender Cosas Nuevas - Parte 3

El el pasado post hablamos sobre los test de práctica como una de las estrategias más efectivas para aprendizaje. Hoy les voy a compartir lo que nos enseña John Dunlosky acerca de otra de las mejores prácticas

Aprendizaje Distribuido.



Una segunda estrategia muy efectiva es el aprendizaje distribuido o práctica distribuida que  es una técnica sencilla y fácil de usar. Considere los siguientes ejemplos.


Estudiar para ortografía de primer grado. Usando una hoja de trabajo para guiar su práctica, una joven puede tomar uno de dos enfoques. Ella puede practicar deletreando palabras escribiendo cada una muchas veces directamente debajo de la palabra impresa en la hoja. Después de practicar una palabra repetidamente, ella se movería a la siguiente y practicaría esa palabra muchas veces escribiéndola debajo. Este tipo de práctica es llamada práctica masiva porque el estudiante practica cada palabra múltiples veces de corrido, antes de moverse a la siguiente.


Una estrategia alternativa para la joven sería practicar escribir cada palabra solo una vez, y después de transcribir la última palabra, devolverse a la primera y escribir cada una de nuevo, etc., hasta que la práctica esté completa. Este tipo de práctica es llamada práctica distribuida, porque la práctica con cualquier palabra está distribuida en el tiempo (y el tiempo entre práctica de cualquier palabra es llenado con otra actividad -- en este caso, escribir otras palabras)


En este ejemplo, se realiza la práctica masiva o distribuida en una sesión individual. Ahora, imagine un estudiante de octavo grado intentando aprender algunos conceptos básicos de geología para un examen que se aproxima. El joven puede leer sus notas diligentemente en una única sesión la noche antes del examen, hasta él piensa que está listo para el test -- una táctica de estudio llamada abarrotar, la cual usan todos los estudiantes prácticamente. O como una alternativa, él puede estudiar sus notas y textos durante una sesión corta varias noches antes del examen y entonces estudiar de nuevo la noche antes. En éste caso, el estudiante distribuyó su estudio en dos sesiones.


Los estudiantes retendrán conocimiento y habilidades por un periodo de tiempo más largo cuando ellos distribuyen su práctica así que cuando hacen una única sesión masiva, incluso si se usa la misma cantidad de tiempo de forma masiva o de la forma distribuida en sus prácticas. Desafortunadamente, a pesar de todo, muchos estudiantes creen que el aprendizaje masivo es mejor que el distribuido.


Una razón para esta idea falsa es que los estudiantes se familiarizan fácil y rápidamente con el material objetivo durante una sesión masiva, pero aprender parece ser más lento con el aprendizaje distribuido. Por ejemplo, el estudiante de primer grado rápidamente escribe la palabra correcta después de practicarla muchas veces sucesivamente, pero cuando la misma práctica es distribuida, el estudiante parece luchar después de varios intentos. Igualmente, el estudiante de octavo grado puede familiarizarse rápidamente con sus notas después de leerlas dos veces en una misma sesión, pero cuando distribuimos esta práctica en dos sesiones de estudio, él puede darse cuenta de cuánto ha olvidado y usar tiempo adicional para ponerse al día.


En ambos casos, el aprendizaje se siente más duro cuando éste es distribuido que cuando es masivo, pero las capacidades y el aprendizaje que los estudiantes pueden sentir (y los profesores pueden ver) durante el aprendizaje masivo es muchas veces efímero. Por el contrario, el aprendizaje distribuido puede requerir más esfuerzo, pero es esencial para obtener conocimiento en una manera que va a ser mantenido (o fácilmente reaprendido) durante largos periodos, educacionalmente relevantes, de tiempo.


La mayoría de estudiantes, ya sea que se den cuenta o no, usan la práctica distribuida para dominar muchas actividades, pero no cuando están estudiando. Por ejemplo, cuando se preparan para un recital de danza, la mayoría de los aspirantes a bailarines van a practicar la rutina noche a noche hasta que la tengan dominada; no harán toda la práctica la noche justo antes del recital, porque cada uno sabe que éste tipo de práctica probablemente no va a tener éxito. Así mismo, cuando juegan juegos de vídeo, los estudiantes ven sus habilidades y destrezas mejorar dramáticamente en el tiempo en gran parte porque ellos se mantienen regresando a jugar en una forma distribuida. En éstos y en muchos casos, los estudiantes se dan cuenta que más práctica o juego durante la sesión actual no va a ayudar mucho, y puede que incluso vean su desempeño debilitarse cerca del fin de la sesión, así que por supuesto, toman un descanso y regresan a la actividad más tarde. Sin embargo, por la razón que sea, los estudiantes no usan a menudo una práctica distribuida a medida que trabajan por dominar el contenido del curso.


No usar la práctica distribuida para estudiar es desafortunado, porque la evidencia empírica de los beneficios de la práctica distribuida (sobre la masiva) es abrumadora, y la estrategia misma es relativamente fácil de entender y de usar. Incluso así, sospecho que muchos estudiantes van a necesitar aprender cómo usarla, especialmente para poder distribuir la práctica a través de múltiples sesiones. La dificultad es simplemente que la mayoría de estudiantes se preparan a estudiar solo cuando se acuerdan que el próximo examen es mañana. En ese punto, abarrotarse de información es su única opción. Para distribuir la práctica en el tiempo, los estudiantes deberían establecer bloques apartados de tiempo a través de cada semana para estudiar el contenido de cada clase. Cada bloque de estudio deberá ser mucho más breve que una sesión de estudio de toda la noche, y ésta sesión debería incluir material de estudio (y el uso de test de práctica) que haya sido recientemente recibido en clase así como material estudiado en sesiones anteriores.


Para usar la práctica distribuida exitosamente, los profesores deberían enfocarse en ayudar a los estudiantes a organizar cuántas sesiones de estudio necesitarán antes del examen, cuándo deberían tener lugar esas sesiones (qué noches de la semana), y qué deberían practicar durante cada sesión. Para cualquier clase, dos bloques de estudio cortos por semana podría ser suficiente para estudiar material nuevo y para reestudiar material ya repasado.


Idealmente, los estudiantes usarían test de práctica para estudiar el material previamente repasado. Si ellos lo hacen, van a retener rápidamente el material previamente aprendido después de sólo un puñado de sesiones, las cuales van a dejar más tiempo para estudiar material nuevo. Por supuesto, los estudiantes pueden necesitar ayuda organizando sus calendarios de estudio (especialmente cuando ellos son muy jóvenes), y pueden necesitar algo de estímulo para usar la estrategia. Pero usando la práctica distribuida (especialmente si es usada con los test de práctica), muchos estudiantes van a empezar a dominar material que ellos nunca pensaron que podrían llegar a aprender.


Los profesores pueden también usar la práctica distribuida en el salón de clase. La idea es volver al material y los conceptos más importantes durante días de clase. Por ejemplo, si ya se están manejando quizzes semanales, un profesor podría fácilmente incluir contenido que se repite en estos quizzes de manera que los estudiantes reaprendan algunos conceptos de una manera distribuida. Repitiendo puntos claves a través de lecturas no solo realza la importancia del contenido sino que también da a los estudiantes una manera de practicar de forma distribuida. Realizando un examen acumulativo que fuerce a los estudiantes a revisar la información más importante es otra manera de estimularlos a estudiar el contenido de una forma distribuida. Lo cierto es que, usar exámenes acumulativos puede parecer castigador, pero si el profesor resalta cuáles contenidos son los más probables a ser evaluados (porque es el contenido más importante para que los estudiantes retengan), entonces prepararse para un examen acumulativo no tiene porqué intimidar. De hecho, si los estudiantes continúan usando un calendario de práctica distribuida en la clase, ellos pueden darse cuenta que prepararse para un examen acumulativo es menos difícil de lo que sería de otra manera porque ellos ya van a estar bien versados sobre el material.

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